Cuidar el pico de los loros
No cabe discusión alguna cuando se dice que el pico es uno de los miembros más importantes del cuerpo de los loros. Lo utilizan en todas las tareas cotidianas de su vida: comer, desplazarse, sujetarse, manipular objetos…
Cómo es el pico de los loros
El pico de los loros posee una curvatura y una robustez dignas de admirar. Y, por si fuera poco, en su punta poseen gran parte del sentido del tacto, junto con la lengua.
Estas aves pueden mover independientemente la parte superior e inferior de su pico, lo que les proporciona mucha más fuerza y, sobretodo, agilidad. Este movimiento es especialmente importante para partir alimentos o agarrarse a las ramas.
Cuidados especiales del pico
Lo primero que hay que destacar es que la mayoría de loros son capaces de mantener su pico en perfecto estado, solo con la ayuda de unas perchas limauñas (en las que también limarán su pico) y ramas naturales como nuestros reposa aves de naranjo.
En estado normal, el pico crece entre 1 y 3 mm al mes aproximadamente, de ahí la importancia de proporcionarles objetos con los que puedan pulir y afilar su pico. Siempre hay que proporcionar accesorios naturales, evitando los de plástico que son resbaladizos y no ayudan a desgastar.
Problemas con el pico de los loros
A veces, incluso extremando las precauciones e incorporando accesorios naturales, surgen problemas en los picos de nuestras aves. Pueden ser provocados por varias causas, como enfermedades, golpes o deficiencias alimentarias.
Enfermedades: pueden ser congénitas, por lo que el loro nacerá ya con el pico deformado (si se detecta muy temprano se puede intentar corregir con prótesis o correctores), o causadas por virus como el PBFD. Se tiene que estudiar y tratar cada caso de forma independiente, puesto que son muy variables.
Golpes: cuando recortamos las alas de nuestras aves, les quitamos la capacidad de equilibrar su vuelo y es muy frecuente que se golpeen contra el suelo o algún objeto. También cuando dejamos las ventanas cerradas sin cubrir con cortinas o durante peleas con otros loros pueden sufrir daños en el pico. Si no son muy graves, curarán y se regenerarán con el tiempo, pero si la herida es grave necesitará atención veterinaria.
Desnutrición: una mala alimentación puede conducir a deformidades en el pico, o crecimientos excesivos. Es muy importante seguir una dieta adecuada para cada especie de ave, para que se mantengan sanos y bien cuidados. Incorporar huesos de jibia o piedras de calcio en la dieta de los loros es muy recomendable.
